El 25 de noviembre volveremos a
hablar de la violencia de género, los medios de comunicación se harán eco, un
año más, de la “celebración” de este día, infinidad de estadísticas pondrán de
nuevo ante nosotros esta realidad de nuestro país y del resto del mundo en una
sociedad que tiene aún muchos temas pendientes y que no ha sabido poner remedio
a una situación que afecta a tantos seres humanos.
Ese día también podemos tratar este tema en las
escuelas, salir a la calle para
seguir luchando por la erradicación de toda violencia de género, gritar
que estamos hartos de tanta violencia y de tanta impunidad, llamar a la
participación en una lucha que deberíamos llevar a cabo todas y todos. Pero la
violencia de género está presente a diario en la calle, en la escuela, en la
televisión... y no es, como algunos
creen, un problema que afecte a unas determinadas clases sociales ni tampoco
generacional. Los últimos datos sobre violencia
de género arrojan indicadores preocupantes sobre la incidencia de esta
problemática en la población joven de nuestro país, una población que se creía que ya había superado antiguos
estereotipos sexistas y que ha crecido
en una sociedad igualitaria y justa.
Según el Informe Andalucía
Detecta, del IAM, y el Informe social de la Juventud en Andalucía del Instituto
Andaluz de la Juventud, el Centro de Estudios Andaluces y la Consejería de
Educación, un 24 por ciento de los
jóvenes andaluces piensa que el lugar de una mujer está en casa con su familia
y
el 10 por
ciento considera que el hombre debe tomar las decisiones importantes en la
pareja.
Del mismo modo, “más del 20% de los jóvenes creen que la
mujer es más débil que los hombres, y 82,9% de los chicos y el 68,5% de las
chicas no creen que tengan riesgo de sufrir violencia de género en sus futuras
relaciones de pareja”. Además, “el 25% de los jóvenes andaluces creen
que las causas de la violencia de género son el alcohol y las drogas y el 50% de los jóvenes cree
que la mujer aguanta la violencia”.( Informe Andalucía Detecta ). Artículos de
prensa relacionados: El País, El Diario.es, Andaluces Diario .
Estos datos
ponen de manifiesto que es necesario contrarrestar distintos elementos de
nuestra sociedad que siguen transmitiendo un
modelo ancestral de relación, basado en un sistema patriarcal y androcéntrico
de la sociedad que tiende a reproducirse de una generación a la siguiente a
través de mecanismos fuertemente arraigados.
Pero lo más paradójico de la
situación que vive la mujer en una sociedad como la nuestra en el momento
actual es que el progreso tecnológico y
social de la sociedad en la que vivimos, lejos de acabar con muchos
comportamientos sexistas y machistas, está creando nuevas formas de maltrato.
No nos referimos ahora a los derivados de los nuevos cánones de belleza impuestos no se sabe por quién ni
atendiendo a qué intereses ( Maltrato Sutil )sino a los relacionados con el uso y abuso que muchas personas hacen de
las nuevas tecnologías. Los jóvenes y
adolescentes usan cada vez más el Whatsapp, Tuenti y llamadas del móvil como
nuevas herramientas para enviar y
recibir mensajes de acoso y para controlar a sus parejas, siendo muy preocupante en este sentido la baja percepción de este riesgo entre este
grupo de población que es la que más
utiliza estas nuevas formas de comunicarse.( Cadena Ser ).
El 25 de noviembre ciertamente es
un día para actuar, pero sin duda alguna no es suficiente. Porque existen
muchas formas de ejercer la violencia de género tenemos que trabajar desde
todos los ámbitos que están a nuestro alcance- laboral, cultural, educativo,
solidario, jurídico, etc.- para eliminarla de una vez por todas de nuestras
vidas.
Empecemos por concienciarnos y
tener claro que todas y todos tenemos derecho no solo a ser protagonistas de nuestra historia
sino también a escribirla.
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