La Feria
del Libro de Madrid cerró
ayer domingo con 7,1 millones de euros en ventas, que suponen
un 9,3% más respecto al pasado año, una cifra muy positiva para el sector, que
viene padeciendo pérdidas desde hace años y de más del 20% tan solo en este
semestre.
Según el director de la Feria, Teodoro
Sacristán, la edición de este año ha funcionado "de bien a muy bien, como
Feria, y ha sido una bolsa de oxígeno para el sector",
añadiendo “esta buena noticia ha sido gracias a los expositores, al público y a
los escritores que han acudido en masa para apoyar la Feria, pero hay
que coger el dato con reservas, porque seguro que mañana estarán las librerías
tan vacías como estaban el día de la inauguración, el 31 de mayo".
Este año con menos recursos y menos
patrocinadores que en años anteriores y bajo el lema de la defensa a ultranza del libro en papel y las
librerías, la Feria ha cerrado con éxito, a lo que
probablemente también han contribuido el buen tiempo y la presencia masiva de
público en todos los actos programados.
Aunque la Feria desde hace años no
facilita las listas de los libros más vendidos, ni de quién es
él o la que triunfa en los "duelos de plumas" a la hora de firmar,
según la casetas consultadas, de entre los libros más vendidos destaca con
fuerza y en primera línea Inferno (Planeta)
de Dan Brown. También los españoles Javier Sierra, con El maestro del Prado (Planeta), y Albert Espinosa, con Brújulas
que buscan sonrisas (Grijalbo).
Frente al éxito de los títulos de las
grandes editoriales también destaca el optimismo y las buenas ventas de las
pequeñas, que se encargan de poner en el mercado excelentes títulos con un
cuidado formato. Igualmente este año a los escritores clásicos, a los
literarios o los autores de best sellers, que acuden cada año a la Feria, se
han sumado los comunicadores y personajes mediáticos. Periodistas,
presentadores y colaboradores televisivos han congregado decenas de personas y
han provocado colas interminables, como la que tenía el cocinero Jordi Cruz para firmar el
libro del programa de TVE MaterChef. Una afluencia masiva que en algunos casos ha despertado el enfado de algún escritor que se ha visto sepultado por la
cantidad de gente que acude a ver a sus ídolos de la tele para que les firmen
los libros, o en algunos casos productos de mercado, que han escrito. En este
sentido, Sacristán ha subrayado que en la Feria todos caben porque son autores
de libros y les apoyan las editoriales, "y bien venidos sean",
apunta. Aunque ha querido dejar claro que la Feria apoya desde hace ochenta años
a los escritores de siempre: "He oído que se decía que gracias a los
mediáticos venía el público, y eso no es así, porque los escritores siempre han
estado aquí y han recibido la visita de sus lectores, ese es precisamente uno
de los atractivos de este encuentro".
Con el lema El
libro es la respuesta, la Feria ha tenido una
abultada cartera de actividades, dentro y fuera del Retiro, así como los
homenajes a José Luis Sampedro, Nicanor Vélez y Javier Cambronero.
FUENTE: 20minutos.es
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